- El mundialmente famoso Museo del Prado ha cambiado los títulos de muchas obras de arte
- Las descripciones de las pinturas también se han cambiado para que sean menos ofensivas.
- Los trabajadores de la prestigiosa empresa examinaron cerca de 30.000 artículos
El mundialmente famoso Museo del Prado de España cambiará el nombre de las pinturas y eliminará miles de palabras «ofensivas» de sus descripciones, luego de una importante revisión para garantizar que la obra de arte histórica cumpla con las leyes de discapacidad del país.
Como parte de la revisión, los trabajadores del Prado examinaron 27.000 descripciones de pinturas en su sitio web y carteles que acompañan a 1.800 obras de arte.
Las pinturas que serán reemplazadas incluyen The Boy Vallecas de Velázquez, pintado en 1638, representa a Francisco Lezcano, un vasco que se sabe que estuvo en la corte real de España entre 1634 y 1649, cuando murió.
Un cartel que describía la pintura decía anteriormente: «Además de enanismo, padecía «cretinismo con oligofrenia».»
Ahora dice: «Además de acondroplasia, padecía «cretinismo con oligofrenia».»
El mundialmente famoso Museo del Prado de España cambiará el nombre de las pinturas y eliminará miles de palabras «ofensivas» de sus descripciones.
El signo de DEra el Bufón El Primo, editado por Velázquez. Anteriormente decía: «Este es uno de los retratos de enanos de Velázquez».
Ahora dice: «Este es uno de los retratos de Velázquez».
Un funcionario del museo dijo Los tiempos: 'Tenemos la obligación de predicar con el ejemplo como institución líder.'
Y, 'Los consensos políticos, con un criterio tajante, hemos decidido reconsiderar, no vemos nada extraño cuando fueron escritos, pero ahora no están desactualizados'.
Señalando una pintura de principios del siglo XIX de Saturno devorando a su hijo, el maricón, Anti-Gila, del renombrado artista Francisco Goya, el museo dijo que no cambiaría los títulos de las obras existentes como «históricas».
Pero reemplazó dos obras de arte de Rodrigo de Villandrando y Juan van der Hamen y León, anteriormente tituladas: 'El príncipe Felipe y el enano, Miguel Soplillo' y 'Retrato de un enano'.
El primero eliminó la palabra «enano» y el otro la sustituyó por la palabra «bufón».
Europa ha experimentado una crisis en las publicaciones y las artes durante el año pasado, que ha visto a importantes instituciones cambiar de idioma y títulos para capitular ante audiencias más jóvenes.
En febrero pasado, la editorial Puffin Books fue criticada por suavizar el lenguaje de varios de los libros de Roald Dahl hasta convertirlos en un «lenguaje despectivo».
Tres años de funcionamiento dieron como resultado cientos de palabras y párrafos eliminados o modificados, telegrama descubierto en ese momento.
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